SANTO DOMINGO.- Tras mostrar avances significativos en los campos del entretenimiento y la seguridad, la tecnología de los drones incursiona en prometedoras aplicaciones en el campo de la salud y asistencia médica, como los experimentos para salvar vidas de personas infartadas.
La mayoría de estas ideas se desarrollan en Europa. Se destaca el proyecto Smart Aid, consiste en un drone capaz de transportar un equipo de primeros auxilios completo, incluyendo un desfibrilador.
El prototipo diseñado por Stefen Riegebauer, de Austria, cuenta con un equipo GPS y resulta ideal para salvar el retraso del tránsito urbano o las dificultades de los caminos rurales, como describe el portal español somosmedicina.com
Otra iniciativa interesante es el Defi-copter. El emprendimiento fue desarrollado por Definetz, una organización alemana sin fines de lucro dedicada a la prevención de muertes por paros cardíacos, los fabricantes de drones Height Tech GmbH y la empresa suiza Schiller (especializada en manufacturación de desfibriladores).
“Con una app que localiza al sujeto que solicita ayuda, el dron, que vuela a 70 kilómetros por hora y tiene un radio de acción de 10 kilómetros, descarga el desfibrilador con un pequeño paracaídas a muy poca altura, evitando la necesidad de aterrizar”, detalla la página.
Un ilustrador ejemplo del potencial de estas iniciativas de investigación y desarrollo para el uso de drones lo muestra este video, sobre un prototipo desarrollado por TU Delf, la Universidad Tecnológica de los Países Bajos.