SANTO DOMINGO (RD).-“Solo de 1962 a febrero de 2018 la UASD ha entregado al país 231,500 profesionales de grado, ha entregado saber, ha entregado conciencia, ha entregado mártires y sus entrañas de madre nutricia”.
La información la resaltó el economista e investigador Faustino Collado durante el acto de presentación de los docentes de la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) que compiten para la Rectoría.
Collado destacó que la UASD entregó a la sociedad “los primeros modelos de democratización electoral, de participación plural en la dirección de la administración, la primera carrera administrativa general, modelos de desconcentración y descentralización, el ejemplo de transparencia financiera, y uno de los valores más preciados del ser humano, la solidaridad total con el caído, con el perseguido, con el abandonado, con el desgraciado por las injusticias y los privilegios de un sistema económico y social individualista”.
El educador se preguntó: “¿Qué ha pasado que de cada 100 estudiantes que ingresaron a la UASD sólo hemos graduado 6?” y, al concluir su discurso, aseguró que “o innovamos o perecemos”.
A continuación el discurso del economista Faustino Collado, candidato a Rector de la UASD.
Señores:
Rector Magnífico, Dr. Iván Gullón
Honorables miembros de la Comisión Central Electoral
Colegas candidatos a la Rectoría, y demás candidatos y candidatas
Universitarios todos:
Permítanme, en primer lugar, enviar mi solidaridad con un ex Rector, que debió estar aquí, pero que su estado de salud se lo impide. Me refiero al Ing. Miguel Rosado, un Rector que se atrevió a hacer lo que ningún Rector de los que vivieron detrás se atrevió a realizar. De igual modo, permítanme recordar a una persona que hace cuatro años, en un acto como este, estuvo sentada ahí, donde hoy está el Dr. Iván Gullón, pero que una bala asesina le ha impedido que hoy esté con nosotros. Me refiero al es Rector Mateo Aquino Febrillet.
Ahora, estas son mis palabras de orden:
Sucedió una tarde de octubre, hace 479 años, tres meses y 18 días; se emitió con el nombre de Apostolatus Culmine. Se había decidido levantar la primera universidad del nuevo mundo, que no era nuevo, sino desconocido por algunos, brotando una luz que irradió un Caribe ateniense y un continente renacentista.
Hubo momentos de alza y baja, caía y se levantaba, y para 1786 una cantidad impresionante para la época de 50 doctores dictaban ocho cátedras, en cinco áreas del conocimiento. Desapareció varias veces y para 1914 resurgió como el ave fénix, dándonos hasta el día de hoy 103 años y tres meses de iluminación cultural, de identidad nacional, de profesionalización y de futuro. Solo de 1962 a febrero de 2018 la UASD ha entregado al país 231,500 profesionales de grado, ha entregado saber, ha entregado conciencia, ha entregado mártires y sus entrañas de madre nutricia.
Entregó, también, los primeros modelos de democratización electoral, de participación plural en la dirección de la administración, la primera carrera administrativa general, modelos de desconcentración y descentralización, el ejemplo de transparencia financiera, y uno de los valores más preciados del ser humano, la solidaridad total con el caído, con el perseguido, con el abandonado, con el desgraciado por las injusticias y los privilegios de un sistema económico y social individualista.
Y he aquí que vengo hoy a preguntar dónde ha quedado esa grandeza espiritual, histórica, institucional, que sirvió de ejemplo para fundar las universidades de San Marcos, de Caracas, de La Habana, de todas las universidades dominicanas, y el mérito de ser cofundadora del primer Estado dominicano en 1821.
¿Qué ha pasado que de cada 100 estudiantes que ingresaron a la UASD sólo hemos graduado 6? ¿Por qué nos hemos desconectado del pueblo y el pueblo se ha desconectado de la UASD? ¿Adónde ha ido a parar la actividad científica que no hemos sido capaces de crear una sola patente? ¿Qué tanto se ha degradado la institucionalidad que ya no se respetan las normas internas y externas, deshonrando a tantos hombres y mujeres que se sacrificaron por ellas?
Estoy aquí para proclamar, junto a un grupo de destacados académicos y académicas, inspirados en los momentos gloriosos y ejemplares de la UASD, comprometidos con la institución y el país, que el modelo actual de la UASD, clientelista, populista y anárquico, pone en peligro la existencia misma de la UASD autónoma y nacional, que el libertinaje ha deformado el modelo autonómico del 1962, que los intereses de grupos depredadores, el partidismo y el nepotismo han sepultado el modelo crítico y autocrítico del Movimiento Renovador de 1966, y que el personalismo y la concentración de funciones han traicionado el modelo democrático de Córdoba de 1918 del que somos herederos.
Anunciamos, que hemos iniciado la elaboración del Plan Estratégico de la UASD 2018-2038, que será completado en un proceso participativo e institucional, en donde se recogerá el nuevo modelo de universidad pública que necesita el desarrollo humano nacional, un modelo de autonomía responsable, con presupuesto equilibrado, con financiamiento interno y externo por resultados, con la cantidad de estudiantes que pueda albergar de acuerdo a su capacidad física y financiera, con una reestructuración orgánica que elimine duplicidades, fusione organismos, instancias y categorías, para simplificar y hacer eficiente los procesos y los servicios.
El modelo de universidad con el que estamos comprometidos, acreditada, internacionalizada, útil socialmente y creadora de conocimientos registrados y patentados, abarcará un primer periodo de 20 años, no de 4 porque sería una demagogia, para que en sus 500 años resurja nueva, como en cada luna nueva, como dijo el poeta en Yelidá. Para esto es esencial que cambie el burocrático modelo de investigación existente, basado en institutos dispersos, para dar paso a uno o dos grandes centros de investigación e innovación tecnológica, en donde se cree sinergia y se potencie el quehacer científico. En cuanto al posgrado, se disminuirá la dispersión actual, y se promoverá y subsidiará el doctorado a todos los profesores interesados.
Sin pensamiento estratégico, sin estrategias y sin aval histórico no habrá cambios de fondo en la UASD, y las propuestas y las metas se desvanecerán en el camino y los sueños terminarán en pesadillas. Para darle forma institucional al nuevo modelo uasdiano procederemos a convocar en el mes de octubre de este año una Claustro Mayor Transformador, que apruebe la nueva institucionalidad basada en un fuerte régimen de consecuencias para quien no cumpla el mandato dado por el soberano. La UASD hay que ordenarla y disciplinarla, para que sea una casa digna de las personas decentes.
Os digo a los uasdianos, sobre todo a los de buena voluntad, que, o siguen presa del estatus quo y los Madancitos financieros, que han hundido y saqueado esta academia, a riesgo de profundizar la crisis, paralizar su jubilación y sentirse inútiles, o giran 180 grados, rompen las ataduras que aprisiona las mentes y ata a intereses pasajeros, para sembrar en suelo fértil, que es el terreno del interés general, donde todos salimos beneficiados, de una manera duradera y sostenible.
Finalmente, hago una llamado a la Comisión Central Electoral para que sea rigurosa en el cumplimiento de las reglamentaciones electorales y las leyes nacionales, que ya vienen siendo violadas, donde los candidatos que son funcionarios usan sus cargos y los recursos del Estado para sacar ventajas electorales. Esto no puede continuar.
“O innovamos o perecemos”.
Trabajemos para que el buen juicio se imponga.
Lo lograremos.
¡Somos el porvenir!
Muchas gracias.
