SANTO DOMINGO (RD).- El director del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (Conavihsida), Víctor Terrero, pidió a las iglesias apoyar el proyecto de colocación de máquinas dispensadoras de condones en universidades y plazas comerciales.
Terrero dijo que esa forma, los líderes religiosos estarían cooperando con las autoridades en la reducción de los indicadores de salud que constituyen “una vergüenza para el país”, como son las infecciones de transmisión sexual, los embarazos no deseados y las muertes maternas.
Señaló que “no se trata de motivar el sexo entre los adolescentes y jóvenes, sino de contribuir a reducir cifras que se constituyen en una afrenta para el sistema de salud y el país, que como la mortalidad materna nos arrebata unas 173 mujeres, que mueren cada año y de estas el 15% son adolescentes”.

“Esa es la dura realidad que enfrentamos y si juntamos esto a las infecciones de transmisión sexual (gonorrea, clamidia, tricomoniasis y el virus del papiloma humano), este último que está causando un aumento considerable del cáncer cérvico uterino, estamos peor”, dijo el funcionario.
Recalcó que los datos no paran ahí porque los embarazos en adolescentes se incrementan a un ritmo casi exponencial y que en el 2017 las nuevas infecciones por VIH fueron 2,357.
“Nosotros, como institución, pedimos a los religiosos de todas las denominaciones que coordinemos trabajos, para juntos ayudar a bajar esas cifras, que su interés es el nuestro”, insistió.
Dijo que, aunque favorece la prédica de fidelidad en las parejas, así como de la posposición de la actividad sexual por parte de los jóvenes, las autoridades y las iglesias deben trabajar juntas en que, como país, República Dominicana pueda “reducir las muertes maternas y que coordinadamente podamos lograr bajar las casuísticas de ITS y VIH”.
Víctor Terrero asegura que la estrategia de venta de condones, sumada a una educación sexual en las escuelas, contribuirá significativamente a mejorar la salud de la población sobre todo de las mujeres.
El Conavihsida y Profamilia firmaron un convenio de trabajo que posibilitará la puesta en funcionamiento de 270 máquinas dispensadoras de condones, ubicadas en el Distrito Nacional, Santo Domingo, Santiago, San Francisco de Macorís, San Juan de la Maguana, Barahona, San Pedro de Macorís y La Altagracia.