“Mi primer amor fueron las aves y ellas me llevaron a ser fotógrafo”, dice Pedro Genaro, fotógrafo de la naturaleza

0
4097
Pedro Genaro en la Laguna de Oviedo, en el sur de República Dominicana, captado desde el lente de Silvani Hernández.

SANTO DOMINGO (RD)-…como te contaba, Gaby: tropezar bajo el follaje del Parque Mirador Sur con Francisco Alba, el biólogo que mira el mundo a través de una cámara fotográfica que persigue el vuelo de las aves de la isla Santo Domingo, me lleva ahora a entrevistar a Pedro Genaro.

Ya sé que, al igual que yo, eres fiel seguidora de sus cuentas en Instagram (@pgenaro) y Facebook (pedrogenaro829). Porque sus imágenes de la flora y la fauna van conformando un archivo de sublime belleza y, a la vez, un triste testimonio perenne de muchas especies amenazadas que, lamentablemente, se extinguen debido a la depredación de sus hábitats naturales.

Pedro Genaro, como te había dicho, preside la Asociación de Fotógrafos de Naturaleza (Adfona), pero debes leer la entrevista para que te enteres de que también forma parte de otras entidades, como la Fédération Internationale de l’Art Photographique (FIAP).

Este artista del lente anda atareado por los senderos de nuestros campos, mostrando a sus estudiantes la riqueza de nuestra flora y fauna. “Tengo prisa por mostrárselas, porque no sabemos cuánto tiempo más la vamos a disfrutar”, dice.

Se queja de que en esta isla, debido a su pequeñez geográfica, “a veces (yo diría que casi siempre) las decisiones políticas se toman para beneficiar a una minoría”, y, en consecuencia, “se pierden recursos naturales para siempre”. 

“Estamos a expensas de los intereses de sectores de poder que no entienden ni quieren entender la importancia de la conservación”, lamenta Genaro.

¿Dónde nace Pedro Genaro Rodríguez? 

En la ciudad intramuros, Zona Colonial. La influencia de mi madre, mi abuela y bisabuela maternas me hace renacer en el Sur, entre Jaragua, Bahoruco y Lago Enriquillo. Estoy casado con una mujer maravillosa y tengo tres hijos de quienes me siento muy orgulloso. 

¿Además de la Adfona, eres miembro de alguna organización ambiental o profesional? 

Soy miembro fundador y actual presidente de la Adfona, miembro consejero de la Fundación Moscoso Puello (FMP) y miembro de la directiva de Grupo Jaragua. También soy miembro de Fotogrupo y de la Fédération Internationale de l’Art Photographique (FIAP). 

¿Cuéntanos sobre la Adfona, cuál es su objetivo? 

La Adfona es una sociedad sin fines de lucro que tiene como misión colaborar con la preservación del medio ambiente mediante el arte de la fotografía, con el fin de que los dominicanos conozcan la belleza de su fauna y flora incentivándoles  a protegerla y amarla.

¿Por qué escogiste las redes sociales para proyectar tu trabajo y qué esperas de estas plataformas? 

Aparte de hacer fotos, me gusta mucho escribir, así que desde el año 2006 llevo el blog “Crónicas de los minutos que ya pasaron. Con él gané dos premios importantes, el de Arroba de Oro al Mejor Blog (2007) y el Premio Listín Diario al Mejor Blog (2008). Actualmente me manejo principalmente con Facebook (pedrogenaro829) e Instagram (@pgenaro) porque están orientadas a la imagen, que es lo que yo hago. Mantengo el blog porque con él dí a conocer mi trabajo y permite encontrar mejor los datos en motores de búsqueda. En la actualidad las redes tienen para mí una doble función: mantener una relación con el público y la de poder expresar mis posiciones sobre el tema medioambiental en el país.

¿Cuéntanos un poco de tus estudios y trayectoria profesional? 

Estudié la licenciatura en Administración de Empresas porque tenía que trabajar en el negocio familiar. Esto me preparó para muchas cosas en la vida, pero mi vocación era la fotografía, así que comencé como autodidacta, con la mentoría en arte de la mano de Kutty Reyes. En fotografía de conservación tuve la oportunidad de aprender muchas cosas de Eladio Fernández y mi mentor en fotografía artística fue Domingo Batista. Estudié Fotografía documental con Raul Touzon y Sebastián (Suki) Belaustegui.  Estudié preparación de portafolios con Ricardo Viera, curador emérito de Lehigh University Museum. De igual manera realicé dos diplomados: “Procesos, géneros, tendencias y prácticas artísticas en la creación fotográfica” (PUCMM/ Centro de la Imagen) y “Narrativa, discurso y formas de hacer” (Centro de la Imagen”). También hice un año de diplomado en línea sobre fotografía contemporánea en “Página en Blando”, bajo la tutoría de Juan Antonio Molina.

Francis Mesa, uasdiano, cronista de espectáculos y coleccionista de… de… calcetines

Aunque ya conocía la fotografía como pasatiempo desde 1982, lamentablemente en 1987 me robaron el equipo y la dejé  por un tiempo. En 1999 retomé la fotografía, aún usando cámara análoga y rollos de diapositivas. En 2002 comencé a tomar fotos digitales y ya nunca más paré. Mis inicios están marcados por la fotografía de naturaleza y he mantenido mi más fuerte producción en este género, ahora más relacionado con la conservación. También hago fotografías artísticas, y en ambos casos trato de hacer planteamientos relacionados con mis compromisos con la naturaleza, la identidad y la justicia. 

Afortunadamente he sido premiado varias veces en concursos y esto me ha permitido dar a conocer mi obra, pero creo que es mi formación fotográfica la que me ha dado la disciplina para enfocarme en contar historias y hacer trabajos en serie, más que conseguir fotos buenas aisladas. En este sentido, he tratado de que mis exposiciones sean coherentes y lleven un mensaje. Mi exposición más reciente “Fiat Pisces” se convirtió en un libro que publiqué en el año 2018 y trata sobre la relación sobre el hombre y el mar.

¿Qué te motiva a regalarnos tanta belleza? 

La belleza es algo relativo y  fluye de forma distinta con cada fotógrafo. Cada quien tiene una propuesta estética asociada a sus sujetos y a su creatividad. Con la naturaleza digamos que me ha sido fácil, pero no todo el mundo lo ve igual que yo. Cuando tengo talleres y llevo a mis estudiantes a sitios remotos me dicen: “la verdad es que nunca imaginé que este lugar era así”. Entonces, yo pienso que es importante contagiar a las personas con el entusiasmo de poder ver la naturaleza con ojos distintos. Me atrevo a decir que más allá de una cuestión estética es un tema de urgencia. Tengo prisa por mostrarles, porque no sabemos cuánto tiempo más la vamos a disfrutar. En una isla pequeña donde a veces las decisiones políticas se toman para beneficiar a una minoría, se pierden recursos naturales para siempre. Estamos a expensas de los intereses de sectores de poder que no entienden ni quieren entender la importancia de la conservación.

Lea entrevista con Francisco Alba Suriel: «En la Sierra de Bahoruco lo que vemos es un daño tremendo»

¿Qué es lo que más te gusta fotografiar? 

La naturaleza en sentido general me motiva mucho, pero sin temor a equivocarme, mi primer amor fueron las aves y ellas me llevaron a ser fotógrafo. A través de ellas necesito documentar los ecosistemas donde viven y resaltar la importancia de conservarlos. Ellas, a la vez, son polinizadoras, dispersoras de semillas, controladores biológicos y en general ayudan a determinar con su presencia o ausencia, qué tan saludable está su hábitat y todo esto redunda en nuestro propio bienestar.

¿Se puede obtener una remuneración que permita subsistir en República Dominicana dedicándose a ser fotógrafo y en específico de la naturaleza? 

Cuando tu pasión se convierte en tu profesión se corre el riesgo de flexibilizar mucho la manera en que la asumes. Quien quiera dedicarse a la fotografía totalmente debe saber que le espera un camino muy intenso que demandará de él o ella mucha dedicación y capacidad de adaptación y anticipación, además de capacidad de planificación. Debe mentalizarse también en que debe cumplir un horario igual que si estuviera en una oficina y establecerse metas diarias y a futuro. Yo, por ejemplo, tengo un banco de imágenes, pero también imparto clases de fotografía y hago fotografía empresarial y retratos.

¿Cuáles son las amenazas ambientales que identificas en República Dominicana?

En general hay una gran debilidad institucional que está permitiendo agricultura, notablemente de aguacates y cebollas, en Áreas Protegidas y ya afecta varias zonas sensibles, sobre todo los bosques húmedos en Sierra de Bahoruco y Valle Nuevo. La caza y el comercio de mascotas también son grandes males que persisten en nuestro país.

¿Alguna recomendación para los jóvenes que tienen pasión por la Biología o la fotografía? 

Que asuman la fotografía como un compromiso y no se queden en la fachada. Que capten la belleza de la naturaleza pero que también se involucren. Traten de formar parte de una ONG que se dedique a la conservación y tengan un discurso coherente en las redes sociales.

Subscribete a nuestro boletín de noticias

También recibirás información exclusiva para ti!
Email address
Secure and Spam free...