Para sobrevivir al coronavirus y al teletrabajo

SANTO DOMINGO (RD).-El teletrabajo, una modalidad apetecida por quienes se agobian con el rigor de la oficina, se ha tornado obligatorio para muchos en los últimos días en cualquier parte del mundo. La experiencia puede resultar traumática, si no se asumen algunas precauciones. Lo demuestra el video de la publicista e instagramer Noemí de Jesús.

Mary Peña, periodista, se siente agobiada y desbordada. Aunque labora para un portal web en Santo Domingo, siempre despachó en la redacción, hasta que la emergencia por el nuevo coronavirus la mandó a trabajar desde su casa. “Siento que siempre estoy trabajando, no tengo descanso”, se queja, en conversación con La Uni.

“El teletrabajo tiene el riesgo de volvernos adictos al mundo laboral”, advierte Laura González en un artículo publicado en E-magister. “Hay que saber separar las diversas parcelas de la vida”, comenta.

Las vivencias de profesionales que ya han hecho hábito del llamado home office han generado tácticas y buenas prácticas que ayudarán a los novatos e improvisados a salir a flote. De tomar en cuenta estas recomendaciones, Mary Peña, cuyo nombre ha sido alterado, de seguro podrá ser suficientemente productiva desde casa, sin perjudicar su tiempo personal y su salud.

De los aportes de la firma Rock Content, de marketing de contenido, y de E-magister, plataforma de aprendizaje en línea, surgen los siguientes consejos:

1- Tomarse el trabajo en serio. Que la falta de supervisión presencial no te haga engañarte. Debes asumir en serio las obligaciones que implica tu función y darlo a notar a tus supervisores y al equipo de trabajo.

2- Organizar un espacio para trabajar. Trabajar en la habitación o la cocina no es buena idea, pues lleva a desconcentrarse o a mezclar tareas. Lo recomendable es preparar un escritorio o seleccionar un espacio limpio y ordenado.

3- Establecer las vías de contacto. Se aconseja utilizar herramientas para organizarte y facilitar la comunicación con tu equipo de trabajo. Rock Content recomienda Hangouts, de Google, un medio gratuito para videollamadas en conferencia, magnífico para reuniones en línea.

4- Agendar cada día. Haz una checklist de tus tareas al principio del día, para poder llevar el control y garantizar resultados.

5- Marcar unos horarios y hábitos estrictos. Establece una rutina con horarios y no dejes de seguirlos. Se recomienda poner el despertador con tiempo, ducharse y desayunar antes de empezar. También debes saber cuándo parar.

6- Hacer pequeñas pausas para comer o estirar los músculos. Una de las más frecuentes enfermedades laborales son las contracturas o lesiones musculares por las malas posturas o por permanecer mucho tiempo en la misma posición. En la casa también pueden darse, sobre todo si no contamos con el asiento adecuado y no tomamos suficiente descanso. Tenemos derecho a parar durante unos minutos para coger fuerzas, advierte Laura González.

7- No llevar una vida sedentaria. Si trabajas desde casa y además sales poco a la calle, te expones a problemas de salud. Asegúrate de hacer ejercicios antes o después de trabajar.

8- Cuidarse de la atracción de las redes sociales. Cuando trabajas desde casa, la tentación de consultar las redes sociales es mayor. Evítalas, pues te distraerán del trabajo.

9- Procura el apoyo de quienes viven contigo. La familia debe contribuir a respetar los espacios y a no molestar, pero también a no cargarte con tareas de la casa en tu horario laboral. Si no lo entiendes, reproduce el video de Noemí de Jesús.

10- Gestione la seguridad de su equipo y los datos. Dependiendo la sensibilidad de la información que maneje tu empresa o institución, la gerencia y el personal deben coordinar las vías y condiciones en que se establecerá la comunicación y el intercambio de material de trabajo, pues se sabe que en la mayoría de los hogares la protección contra intrusos,  delincuentes y accidentes cibernéticos es mucho más frágil.

“Lo ideal sería solicitar a los empleados que auditen las vulnerabilidades de su propio entorno doméstico antes de conectar los dispositivos de trabajo”, recomienda Tony Anscombe en welivesecurity.com. Al menos procura establecer contraseñas complejas, “fuertes”, como se les llama en entornos digitales.