Las recomendaciones de  Salud Pública para disminuir daños respiratorios por humo del Duquesa

0
887
El incendio del Duquesa inició al mediodía del pasado martes. Foto: Roberto Guzmán.

SANTO DOMINGO (RD).-El Ministerio de Salud Pública expresa preocupación por la propagación de la gran humareda que azota desde el pasado martes el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, debido a que aumenta la posibilidad de enfermedades respiratorias en los ciudadanos o de agravar las preexistentes.

El humo está hecho de una compleja mezcla de gases y partículas finas que se producen cuando se queman madera y otros materiales orgánicos, recordó.

“La mayor amenaza para la salud por parte del humo proviene de las partículas finas (microscópicas), las cuales pueden penetrar profundo en los pulmones, provocando una serie de problemas de salud, desde irritación en los ojos y goteo nasal, hasta enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas”, dice.

“La exposición a la contaminación por partículas incluso se relaciona con la muerte prematura”, advierte.

Las poblaciones más vulnerables son los que padecen una enfermedad cardíaca o pulmonar, adultos mayores, cuidadores de niños  o adolescentes, diabéticos o embarazadas a los cuales recomienda continuar sus tratamientos ya prescrito por su médico.

Para disminuir el riesgo, es importante limitar la exposición al humo, en especial si posee mayor riesgo a los efectos relacionados con las partículas.

Salud Pública activó el sistema de vigilancia epidemiológica para el control de exposiciones a humos y enfermedades respiratorias, midiendo la cantidad de partículas suspendidas en el aire proveniente de esta humareda del vertedero de Duquesa para su posterior publicación. 

Mientras, recomienda a la población en general:

No salir de sus hogares a menos que sea estrictamente necesario
Cubrirse nariz y boca con mascarilla o con algún pañuelo o tela humedecida para evitar respirar el humo si la persona se encuentra próxima al incendio. 
Mantener ventanas y puertas cerradas para impedir que el humo ingrese a su casa, y abrirlas para ventilar la casa cuando mejore la calidad del aire. Si es necesario, utilice paños húmedos para sellar ventanas o puertas.
Tomar mucha agua para evitar la sequedad de garganta, evitar frotarse o rascarse los ojos.
Acudir al médico inmediatamente si presenta algún síntoma respiratorio: fiebre, tos, dificultad para respirar, dolor de garganta o cuando sienta que alguna enfermedad preexistente se complique.
Evitar fumar dentro de la casa. Tampoco encender velones, velas o incienso.
Si en su casa o en sus alrededores han caído cenizas del incendio, usar siempre un paño húmedo sobre su nariz o una mascarilla, antes de barrer o limpiar, mojando previamente el suelo y las superficies.
No hacer ejercicios, ni actividad física en las áreas afectadas por la presencia de humo.
Evitar que embarazadas, niños y niñas, adultos mayores y pacientes asmáticos o con enfermedades pulmonares se expongan al humo de manera directa.
Técnicos de Medio Ambiente inspeccionan parte del área incendiada.

Subscribete a nuestro boletín de noticias

También recibirás información exclusiva para ti!
Email address
Secure and Spam free...